domingo, 30 de enero de 2011

JARDINES PARA COLIBRIES (Parte 1)

Por Arquitecto y Máster en Paisajismo y 
Diseño de Sitio de la Universidad de Costa Rica

Foto de Rodolfo Alvarez.


Para entender la dinámica relacionada con un diseño de paisaje para la atracción de aves, como los colibríes, es necesario explicar algunos conceptos relacionados con su comportamiento. La ornitofilia es la polinización de las flores por parte de las aves. Esta es denominada una asociación coevolutiva. Este es un fenómeno de adaptación evolutiva mutua producida entre dos o varias especies de seres vivos como resultado de su influencia recíproca por relaciones como la polinización, (entre muchos otros factores) que conlleva numerosas y distintivas adaptaciones en las plantas, formando un síndrome floral. (1)  Un síndrome floral es un conjunto de caracteres de las flores destinados a atraer a un tipo particular de polinizador. Se incluyen caracteres tales como forma, tamaño, color, tipo y cantidad de recompensa, composición química del néctar, horario y época de floración. (2)



Los cambios en las plantas han provocado cambios en los picos de las aves y a la inversa / Jimmy A McGuire


Registros de significado cultural

La más antigua mención en los anales históricos de los colibríes data de los indios americanos Tainos que habitaban las islas del Caribe, que fueron los primeros nativos en recibir a Colón cuando llegó a América. Los Tainos creían que los colibríes eran los esparcidores de la vida en la tierra. Eran tribus muy guerreras y se sabe que conocían a sus luchadores como guerreros Colibrí, o del colibrí. Esto porque a pesar de ser un pájaro pacífico, defenderá su territorio con el corazón de un águila. (3)




Huitiloxochitl (sello plano de Yucatán).

En México a los colibríes se les asocia al amor y a la religión y antiguamente al dios azteca Huitzilopochtli es representado por un colibrí.



Foto de Rodolfo Alvarez.


Las principales familias de aves especializadas en alimentarse de néctar en el Nuevo Mundo son los colibrís y ermitaños (Trochilidae). Viven en América, desde Alaska hasta Tierra del Fuego. También se encuentran algunos grupos de especies en otras familias como en Icteridae  (incluyen zanates, tordos, y bolseros de América, Icterus), Thraupidae  (llamadas tangaras).

La familia Trochilidae, de los conocidos colibríes o picaflores, fue clasificada recientemente dentro del orden Trochiliformes por Charles Sibley, antes estaban entre los Apodiformes. La familia de los colibríes comprende más de 100 géneros.

 La familia tiene dos subfamilias:

       ·          Phaethornithinae que incluye a los ermitaños. Sus características son que los tres dedos delanteros están pegados en la base. También poseen plumas de dirección (timoneras centrales) extremadamente alargadas. Los ermitaños tiene un plumaje que es fundamentalmente de color castaño, sin irisaciones.

       ·          Trochilinae que incluye a los colibríes. Tienen dedos separados. Sus plumas de la cola (timoneras centrales) no alargadas. (4). Los colores que exhiben son brillantes, un verde iridiscente, por lo general metálico. Su garganta es, puede variar de color rojo brillante, azul, verde esmeralda, aunque sólo se presentan en los machos.

Los colibríes


Foto de Guillermo Chaves H.


Estas aves que se caracterizan por su pequeño tamaño, van desde los 5 cm hasta los 25 cm. Se distinguen porque mueven sus alas con una velocidad que puede alcanzar los 60 a 80 kph,  pueden volar hasta 200 veces su longitud por segundo. Tienen un ritmo cardíaco muy acelerado: pueden emitir hasta 80 latidos por segundo. Según Fred Bassett "en tres metros pasan de cero a 81 kph".

Vuelo de los colibríes

Los colibríes desarrollan un rápido vuelo; sus potentes aleteos son tan seguidos que producen un zumbido. Pueden batir sus alas hasta 70 veces por segundo logrando mantenerse en el mismo sitio mientras succionan el néctar, aunque esto puede variar según la especie; el colibrí gigante, la Patagona gigas, mide unos 25 cm bate sus alas sólo alrededor de 10 veces por segundo. La mayoría de los colibríes de tamaño medio baten sus alas alrededor de 20 a 25 veces por segundo, o sea 1200 a 1500 aleteos por minuto. Para alejarse de las flores los colibríes tienen que volar hacia atrás y son las únicas aves capaces de efectuar esa maniobra. Esto lo puede lograr porque son las únicas aves capaces de rotar las estructuras principales de las alas en cualquier dirección.

Dieta del colibrí


Foto de Rodolfo Alvarez.


Para entender cómo el colibrí poliniza las flores se necesita entender en qué consiste la dieta colibrí. Los picaflores o colibríes se alimentan del néctar de flores y son polinizadores importantes. El colibrí necesita comer cada 10 minutos, esto significa que consumen en alimento cerca de 2/3 de su peso corporal cada día. Un colibrí puede morir de hambre tan solo por dejar de comer dos horas, esto pasa cuando, por ejemplo queda encerrado por accidente dentro de una habitación pero en la noche, o en situaciones en que no haya comida facilmente disponible, son capaces de entrar en una especie de hibernación reduciendo dramáticamente su metabolismo y su ritmo cardíaco y respiratorio, reduciendo así su necesidad de alimento. Ellos comen hasta casi entrada la noche y después duermen hasta el amanecer. El colibrí sobrevive principalmente del azúcar que obtiene del néctar de las flores. Pueden captar un buen suministro cuando hay una abundante floración. Este alimento es energético pero pobre en proteínas, vitaminas y minerales, por lo que complementan su dieta cazando pequeños insectos. Al igual que las abejas pueden calcular la cantidad de azúcar en una flor y pasar por alto las que nos son adecuadas a sus necesidades. (5) Prefieren que el azúcar ronde el 25%,  si es menos de 15% no lo beben. El consumo del néctar es más importante para las especies con flores por la forma en que las flores son polinizadas.

Plantas para atraer colibríes

Las flores que polinizan las aves son coloridas, a menudo rojas o anaranjadas, también amarillas, blancas, azules o moradas lo que indica que hay atracción visual. Tienen una corola tubular, lo cual impide a muchos otros agentes polinizadores cosechar el néctar. No poseen aroma, pues la capacidad olfativa de los colibríes es pobre, y esto impide que la flor pueda ser localizada por insectos que utilizan el olor para orientarse.

El estigma y los estambres tienen una orientación que asegura el contacto con el polinizador. Los colibríes no polinizan las flores a propósito, es más un accidente producto de la coevolución, como mencionaba al principio. Usan su larga lengua para succionar el néctar de las flores a través de la estructura arrollada en la parte exterior de la lengua. El colibrí tiene que pegar su pico largo y afilado en el centro de la flor para alcanzar el néctar, mientras lo obtiene su pico o la parte frontal de la cabeza es cubierta con el polen. Cuando el colibrí ya ha extraído su néctar, se va a volar lejos, pero en 10 minutos necesitará alimentarse otra vez, lo que significa que en un tiempo corto ya estará introduciendo su pico en otra flor. El colibrí introduce el polen de una flor a otra. El polen que recibió provino de los estambres de una planta y, cuando el ave se alimenta de otra flor, el polen a menudo se impregna en el estigma de la nueva planta. Este es un cruce efectivo ya que ha puesto con efectividad el componente masculino en el femenino de las dos flores diferentes, lo que puede dar lugar a la reproducción y el crecimiento de nuevas plantas.

Como el pico de los colibríes es una estructura fuerte y punzante, las flores tienen estructuras de varios tipos para impedir que los ovarios sean dañados durante la extracción del néctar que realiza el ave. Los picos de los colibríes varían su diseño, en tamaño y curvatura, en función de las dimensiones y forma de la flor favorita de cada especie.


Foto de Guillermo Chaves H.

Distribución de los colibríes

Existen alrededor de 330 especies de colibríes que se dan solamente en América. Hay una gran diversidad en casi todo el istmo centroamericano, Colombia, Venezuela y Ecuador. El país que se destaca por la mayor cantidad de especies es Ecuador, tiene alrededor de 130 tipos diferentes de colibrí y se pueden ver en casi todo su territorio; desde las tierras bajas en ambos lados de los Andes y sorprendentemente, hasta en las muy altas montañas. Tienen la capacidad de adaptarse a las zonas altas y frías por lo que son los principales polinizadores ante la ausencia de los insectos y los murciélagos. Algunas especies habitan únicamente los páramos por encima de los 4.000 metros de altitud, por ejemplo la Oreotroch Hus Chimborazo, conocida como Estrellita, que chupa el néctar de las chuquiraguas ( Chuquiraga jussieui).

En Costa Rica son extraordinariamente abundantes ya que se han identificado alrededor de 54 especies, es uno de los países que tiene más diversidad comparativamente con los Estados Unidos que tiene sólo 20 especies. (4)

La importancia de los colibríes es que son muy efectivos en la polinización y lo suficientemente inteligentes como para recordar las variedades de plantas que contienen el néctar más dulce y cuáles son las plantas más abundantes. El resultado es que muchos colibríes vuelven a la misma zona y visitan las mismas especies de plantas cada año, ayudando a las especies que necesitan ser polinizadas y hacen que el néctar que les encanta sea más abundante.
En los bosques tropicales, es por tanto donde encontramos una estrecha relación de los colibríes con la de ciertas especies vegetales; tiene una gran importancia para los ecosistemas por ser agentes polinizadores de gran cantidad de plantas. Lamentablemente la deforestación de muchos bosques para extender cultivos, campos de pastoreo o para desarrollar ciudades ha disminuido significativamente el hábitat de muchas especies.


Foto de Guillermo Chaves H.

Especies amenazadas

La UICN declaro que de las 322 especies conocidas, hay 9 en peligro crítico, 11 muy amenazadas y 9 más como vulnerables, es decir que hay 29 especies en peligro de desaparición.

Ya dos especies de colibríes dejaron de existir, el Esmeralda de Brace (Chlorostilbon bracei) era endémica de las Bahamas y Nueva Providencia y el Esmeralda de Gould (Chlorostilbon elegans) que existía en Jamaica y Bahamas. La principal amenaza proviene de la de la tala indiscriminada de árboles, actividad que conduce a la fragmentación, degradación y destrucción de hábitats naturales. (5) Otras especies muy amenazadas son:

Aglaeactis aliciae es un especie críticamente amenazada (con un población estimada en menos de 250 individuos) se limita a una pequeña área del alto Marañón de La Libertad y Ancash, se le ha visto en el Caserío de Molino Viejo al oeste Perú.

Taphrolesbia griseiventris, Colibrí Coludo de Vientre Gris es endémico de Perú, del norte y parte central los Andes. Esta especie está considerada en peligro, ya que su rango de distribución es muy pequeño, actualmente sólo habita cinco sitios conocidos y la población podría ser muy escaza y desintegrada por áreas muy pequeñas de subpoblaciones fragmentadas.

En Costa Rica habita un colibrí que es único; el Colibrí de ManglarAmazilia boucardi, es endémico de nuestro país. Se encuentra sólo en hábitats como el Humedal Nacional Térraba-Sierpe y otros manglares de la costa del Pacífico, desde la Península de Nicoya hasta el Golfo Dulce. Se alimenta del néctar de flores del mangle piñuela, que es un árbol de los manglares del Pacífico, así como del néctar de otras plantas de estos ecosistemas. (6) Está en peligro por la disminución del área de manglares.

Amazilia Luciae es una especie endémica de un lugar en el occidente de Honduras, su población del llamado Colibrí Esmeralda se encuentra en peligro de extinción por la tala indiscriminada de los bosques que constituyen su hábitat.

Doncha eliza, el Colibrí Tijereta es una especie monotípica endémica de México que se encuentra en las dunas costeras de Yucatán y Quintana Roo. La Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología de este estado considera a esta variedad como especie en peligro de extinción.

Eulidia yarrellii, el ave más pequeña de Chile y segunda entre los colibríes en miniatura del mundo. La Unión de Ornitólogos de Chile alertó sobre el dramático descenso poblacional de este picaflor ariqueño. Se ha determinado que una de las principales causas es la aplicación de plaguicidas en tomates en el Valle de Azapa de Arica, y la sustitución de los bosque nativos, con los árboles “chuve” y el “chañar” que son claves para su alimentación, para extender los monocultivos.

Mellisuga helenae conocido como zunzuncito, colibrí zunzuncito, pájaro mosca o elfo de las abejas es la especie más pequeña de los colibríes y de las aves en general. Habita en Cuba y en la Isla de la Juventud (Isla de Pinos).
Apenas alcanza 5 centímetros. La mitad de su longitud total corresponde al pico y la cola. Su peso es de 2 gramos en los adultos.




Streptosolen jamesonii, foto de Guillermo Chaves.


Flores para atraer colibríes

Lo interesante de este jardín de colibríes es que las plantas que se proponen para atraerlos tienen una abundante diversidad de especies y pertenecen a familias totalmente diferentes, aunque sus flores puedan parecerse en su apariencia externa.

Hay que seleccionar las plantas que tienen más flores, por más tiempo y en más de una temporada. La plantación de estas plantas cerca de las ventanas puede ser una buena idea porque podemos tener a la vista de las aves maravillosas. Se debe planificar la selección de flores para que se pueda lograr una sucesión escalonada durante los meses del año.

Las plantas del género Heliconia tienen zarcillos pegajosos que ayudan a la adhesión del polen a las estructuras blandas como el pico de las especies de Trochilidae. Tienen mucha importancia para algunos jardines productores de flores de exportación, ya que por medio de los colibríes se han logrado hacer híbridos, especialmente en la familia de plantas Heliconidae. (7)
Los colibrís de pico curvo usan flores con corola de esa forma, tales como las de la familia Gesneriaceae.

Atraer colibríes es tan fácil como plantar las flores adecuadas en su jardín, junto con una fuente de agua confiable a manera de gotero. Como se dijo antes la dieta de los colibríes requiere tanto una fuente de energía (néctar) como una fuente de proteína (pequeños insectos). Un jardín con plantas para colibríes es la forma más segura de proveer ambos componentes.


Foto de Guillermo Chaves H.

Comederos para colibríes

Los colibríes también se pueden atraer con comederos artificiales. Estos alimentadores proporcionan un suministro energético a base de azúcar. Esta manera de atraer los colibríes está haciendo que, como a cualquier especie silvestre que se alimente artificialmente, se conviertan en adictos del alimento fácil, y además se perjudica su balance físico natural. 

El néctar hecho si se quiere utilizar un comedero debe tener los mismos ingredientes naturales de las plantas. No conozco una fórmula adecuada para hacerlo. (Se oyen sugerencias).
Los comederos pueden ayudar si hay escasez de plantas. Estos alimentadores pueden contribuir en gran medida a su supervivencia. Hay que recordar mantener siempre limpios el comedero, y no usar productos químicos para su limpieza. El néctar debe ser repuesto cada 2 o 3 días.


Para ayudar con el conocimiento de la flora nativa y naturalizada que atraiga los colibríes recomiendo la continuación de un artículo que espero ir documentando poco a poco sobre este tema:





Foto de Guillermo Chaves H.

La única solución que haga sostenible la diversidad biológica de estas especies es protegiendo su hábitat, y evitando por todos los medios una mayor deforestación de los ya muy fragmentados bosque primarios que quedan. Es preferible evitar los comederos artificiales si se pueden tener plantas nativas con abundante floración para que se alimenten.

Las mejores fotos de los colibríes de Costa Rica: 


Microchera albocoronata. Snowcap. Foto de Carlos Bolaños. Asociación Ornitológica de Costa Rica. 



Selasphorus scintilla. Scintillant Hummingbird. Macho de chispita Gorginaranja. El ave más pequeña que tenemos, la cual compartimos endemismo con Panamá. Foto de Guillermo Saborío V. Página de Asociación Ornitológica Costarricense.


Discosura conversii. Green Thorntail. Colicerda Verde. Vara Blanca de Heredia. Foto de Jeffrey Rodríguez. Página de Asociación Ornitológica Costarricense.


Eutoxeres aquila.  White tipped Sicklebill. Foto de José Ricardo Muñoz Ruiz. Publicado en Facebook de Asociación Ornitológica de Costa Rica. Tomada en San Miguel de Tucurrique en abril del 2019.


Colibrí delphinae. Brown Violetear.  Colibrí Orejivioláceo Pardo. Foto de Felipe Miranda. Asociación Ornitológica de Costa Rica. 2019.

Heliodoxa jacula. Green Crowned Brilliant. Colibrí brillante frentiverde.. Monteverde. Foto de Lukas Adamec. Asociación Ornitológica de Costa Rica.


Lamponis calolaemus. Purple-throated Mountain-gem.  Joyita de la montaña de garganta púrpura. Foto de Winfried Rusch. Costa Rica Birding. San Gerardo de Dota. Savegre Mountain Hotel


Elvira cupreiceps. Esmeralda de coronilla cobriza. Una de las especies endémicas de Costa Rica. Foto de Juan Manuel Sanabria captada durante la gira de la AOCR a Cinchona y Colonia Carvajal. 


Lampornis castaneoventris. White-throated Mountain-gem. Colibrí montañés gorgiblanco  Foto de Mario Wong, en San Gerardo de Dota. Agosto del 2018.



Campylopterus hemileucurus. Violet Sabrewing. Colibrí Morado. Foto de Rosa Miraglietta. 



Campylopterus hemileucurus. Female Violet Sabrewing. Colibrí morado hembra. Quinta Galeon Lodge. Foto de Denise Johnson Shreve. 




Florisuga mellivora. White-necked jacobin. Jacobino nuquiblanco es uno de los colibríes más grandes de nuestros jardines con 13 cms. Hembra a la izquierda, macho a la derecha. Foto de Ian Hardy.


Lophornis helenae. Black-crested Coquette. Coqueta Crestinegra. Foto tomada en Rancho Naturista por Randy Wei.


Panterpe insignis. Fiery-throated Hummingbird. Colibrí Insigne.Central Highlands. Tierras altas de Costa Rica. Foto de John Williams. 


 Phaethirnis guy. Green Hermit Hummingbird. Hermitaño verde.Central Highlands. Cinchona, Provincia de Alajuela. Foto de Hugo Calderón. 



 Selasphorus scintillaScintillant Hummingbird Female. Colibrí Centelleante. Foto de Tony Brown. 

Campylopterus hemileucurus. Violet sabrewing. Ala de sable violáceo. Foto de Tony Brown. 

Colibri cyanotus. Lesser-violetear hummingbird. Colibrí orejivioláceo verde. Foto de Gary Willmott. Nikon D500


(1) http://es.wikipedia.org/wiki/Coevoluci%C3%B3n
(2) http://es.wikiwix.com/?lang=es&action=Trochilidae
(3) http://www.etoxtr.com/es/278.html
(4) http://es.wikipedia.org/wiki/Trochilidae
(5) http://www.enextincion.com/tags/el-colibri
(6) http://bionauta.lacoctelera.net/post/2007/02/01/colibries-precisas-maquinas-miniatura
(7) http://www.guiascostarica.com/espx/aves17.htm
(8) http://www.acguanacaste.ac.cr/rothschildia/v5n1/textos/26.html
http://www.voltairenet.org/article160820.html

sábado, 29 de enero de 2011

El Jardín Botánico Wilson, Costa Rica, algunas de sus especies.

Algunas bromelias del Jardín Botánico Wilson. 
San Vito de Coto Brus, Puntarenas, Costa Rica

Por Arquitecto y Máster en Paisajismo y 
Diseño de Sitio de la Universidad de Costa Rica


"Bromeliaceas (Bromeliads)
Las bromeliaceaes o piñuelas son una familia de plantas neotropical (excepto por una sola especie en Africa). Pueden ser plantas terrestres o epífitas y algunas se han adaptado para contener agua que sirve como criadero de cientos de organismos, desde algas microcópicas hasta ranas arborícoras. La piña, Ananas comosus, es una bromelia de gran valor económico. Costa Rica, después de Brasil, tiene el segundo lugar en diversidad de piñuelas."

Texto del rótulo de presentación de las bromelias en el Jardín Botánico, que tiene una de las colecciones de plantas nativas y exóticas más renombradas del país. Algunas de ellas son:

La Alcantarea imperialis (Carrière) Harms. Es la bromelia más grande que se observa en la primera fotografia arriba y se puede leer su descripción en: 
http://paisajimopueblosyjardines.blogspot.com/2011/01/alcantarea-imperialis-usando-bromelias.html

Vriesea gigantea Gaudich.


Orden: Poales
Familia: Bromeliaceae
Subfamilia: Tillandsioideae
Género: Vriesea
Especie: V. gigantea

Vriesea gigantea es una especie del género Vriesea. Es una las bromelias más espectaculares del Jardín Botánico Wilson, y es también una planta valiosa por lo difícil que es su colecta. Forma una roseta de hojas anchas. Las hojas delgadas y parecen aceradas, de color verde blancuzco a verde ligeramente azulado, gracias a una película de blanca sobre las hojas. A medida que la planta crece hasta su gran tamaño como especie madura, en el centro y al interior de las hojas emergentes surge, en las hojas nuevas un patrón moteado, un signo de que el escapo con flores pronto emergerá. Este llega a una altura de uno y medio a dos metros, las flores amarillas son de forma tubular. Después de la floración, la planta madura irá decayendo en el transcurso de seis a doce meses, dando lugar a pequeñas plántulas que se desarrollan en su base. Estas plantitas sustituirán a la planta madre moribunda y se convertirán en grandes plantas con lo que se perpetua su especie. (1)

Esta especie es endémica de Brasil, una de bromelias epífitas de la Mata (Bosque) Atlántica en Brasil. El Bosque Atlántico es uno de los bosques tropicales más importantes del mundo, siendo considerado en términos de prioridad de conservación debido a su grado de amenaza y megabiodiversidad. La Reserva de la Biosfera de la Mata Atlántica tiene 1,7 millones de hectáreas y fueron declarados Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1999. (2) Las denominadas Reservas del Sudeste en los estados de San Pablo y Paraná poseen las mayores áreas coherentes de Bosque Atlántico en Brasil.

En este bosque, Bromeliaceae es uno de los grupos taxonómicos más relevantes, debido al alto grado de endemismo y alto valor ecológico, principalmente a partir de su interacción con la fauna. Sus poblaciones silvestres se han reducido por las perturbaciones antropogénicas como la destrucción del hábitat y la recolección de depredadores.

Una lista de taxones de Bromeliaceae da cuenta de la gran diversidad de especies que se dan en La Mata Atlántica en Brasil. Se registraron 31 géneros, 803 especies y 150 taxones infraespecíficos. Los géneros Andrea, Canistropsis, Canistrum, Edmundoa, Fernseea, Lymania, Nidularium, Porter, y Wittrockia Quesnelia son endémicos de la zona y Vriesea (166 spp.) Aechmea (136 spp.) Y Neoregelia (97 spp.) son los más diversos.

Otros que merecen destacarse son; Alcantarea, Cryptanthus, Orthophytum Neoregelia, que no son exclusivos del Atlántico, sin embargo presenta en esta zona su centro de diversidad. Estados de la Región Sudeste agregó al sur de Bahía son el hogar de mayor riqueza de especies. En cuanto a la situación de amenaza, se encontró que 338 taxones de Bromeliaceae se citan en las listas oficiales de especies amenazadas. Los corredores de biodiversidad demuestran ser muy pertinentes para la conservación de la familia, porque acogen un gran número de especies endémicas y en peligro de extinción.

Los tres corredores biológicos del Bosque Atlántico son el Central, Noreste y Serra do Mar, que juntos suman 671 especies de Bromeliaceae, que corresponde al 83,6% del total de especies registradas en la zona. El más rico es el Corredor Central, con 396 especies (49,3%), seguido de Serra do Mar, 369 (46%), y el Corredor Noreste, que tiene la menor riqueza (86 especies - 10, 7%).(3)

Vriesea gigantea crece bajo la luz indirecta, incluso al aire libre donde prefiere la sombra y un ambiente libre de heladas. No necesitan del suelo para nutrirse, y debe ser apoyado en un material a base de arena o piedrilla o un lugar lleno de turba y gruesas astillas de corteza para facilitar que el drenaje funcione adecuadamente. Es una planta que se presta para crear un punto focal en el jardín tropical de sombra bajo los árboles grandes o en un contenedor. (1)



Vriesea platynema variegata

Vriesea platynema variegata
Foto de Guillermo Chaves de una Vriesia platynema del Jardín Botánico Robert y Katherine Wilson, en San Vito de Coto Brus, Costa Rica.

Vriesea Platynema es una especie del género Vriesea originaria de Bolivia, Brasil y Venezuela. Vriesea es un género nombrado en honor de Willem Hendrik de Vriese, botánico y físico alemán (1806–1862). Es un gran género de plantas de flores perteneciente a la familia Bromeliaceae, subfamilia Tillandsioideae, contiene cerca de 200 especies en Centro y Sur América. La mayoría de Vriesea son epífitas y crecen sin necesitar tierra del suelo por lo que no tienen raíces, desarrollan un tipo de raíz que las hace adherirse a las ramas de los árboles o rocas, pero estas raíces no les sirve para proveerles algún nutriente. Todos los nutrientes los obtiene a través del "tanque" con agua en el centro que se forma entre la roseta de hojas.

Foto de Guillermo Chaves de una Vriesia platynema del Jardín Botánico Robert y Katherine Wilson, en San Vito de Coto Brus, Costa Rica.

Ésta es una maravilla de bromelia y una de las más hermosas que he visto por sus tonos multicolores. Las hojas son grandes, de color verde oscuro con un estriado en bandas de finas rayas blancas. El color púrpura en los ápices de las hojas, se extiende a un sombreado de color púrpura por debajo, haciendo de éste detalle uno de los miembros más hermosos del grupo. El escapo de la flor puede llegar a los 50 cm de altura con numerosas brácteas de color rojo púrpura con pétalos amarillos. Estas plantas tropicales son capaces de albergar una gran variedad de fauna de insectos. En la naturaleza, las ranas arborícolas pueden desarrollar su ciclo de vida en una bromelia.
Cultivo: todas las vriesias requieren muy buen drenaje, sombra parcial y un sitio en el jardín donde no peguen brizas demasiado frías. El sustrato puede ser el mismo de las orquídeas, musgo, o fibra de coco. Se pueden integrar a un árbol si se aprovecha alguna concavidad. El agua se debe proporcionar moderadamente, hay que hacer aspersiones con agua con frecuencia si el clima es seco y debe asegurarse de que la roseta central esté siempre lleno de agua.


Otras Bromelias que fotografié en visita del 31 de marzo del 2019. Era época seca por lo que algunas de ellas no estaba en floración. Si alguna de las fotos originales desdice o da una idea pobre de la planta coloco una tomada de internet como referencia. 

Neoregelia ampullasea


Quesnelia arvensis
Brasil
Foto de Guillermo Chaves H. en Jardín Botánico Wilson


Nidularium innocentii Lem.
Brasil
Foto de Guillermo Chaves H. Descrita en http://paisajimopueblosyjardines.blogspot.com/2020/04/bromelias-del-jardin-hacienda-la-laguna.html


Billbergia cv fantasia
Suramérica
Foto de Guillermo Chaves H. en Jardín Botánico Wilson


Wuerauhia viridifolia



Vriesia ensiformis. 
Brasil
Foto de Guillermo Chaves H.
http://paisajimopueblosyjardines.blogspot.com/2020/04/vriesea-ensiformis-vell-beer.html



Tillandsia Oerstediana
Costa Rica
Foto de Guillermo Chaves H. en Jardín Botánico Wilson.

Vriesia ringens
Nidilarium rutilans



Vriesia fosteriana
Brasil


Pittcairnia angustifolia
Caribe
Foto de Dominica Botanic Gardens
Pitcairnia angustifolia




Pittcairnia multiflora
Colombia

Aechmea lingulata
América tropical

Aechmea chantinii
Colombia a Brasil

Aechmea mulfondii
Brasil

Orthophytum vacans
Brasil

Aechmea nudicaulis
Brasil a Ecuador

Neoregelia punotatissima
Brasil

Neoregelia ampullacea
Brasil


Pitcarnia atrorubens
México a Colombia

Ananas nanus
Sur-Brasil

Aechmea bromeliifolia
Brasil

Aechmea pineliana
Brasil

Guzmania limgulata
Trópico americano

Vriesia simplex
Colombia-Brasil

Vriesia x vigeri

Vriesia heterostachys
Brasil

Vriesia Erythrodactylon
Brasil

Neoregelia pauciflora
Brasil

Neoregelia concéntrica

Brasil

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