jueves, 17 de febrero de 2011

JARDINES DE ROCALLA Y ROCK GARDENS EN KEW

Rocalla en San Antonio de Escazú, Costa Rica, usando rocas del lugar y con una combinación de plantas como Iris, helechos y otras coberturas. Diseño de Guillermo Chaves.


El término “rocalla” designa a una forma peculiar de jardinería. Es una combinación de rocas y plantas siguiendo concepciones estéticas y requerimientos biológicos específicos. Originaria de los países templados la rocalla ha sido definida y descrita conforme a las manifestaciones de la ecología y geología típicas de sus ámbitos de origen. Las versiones tradicionales más comunes han sido las versiones secas y alpinas. La rocalla alpina es una variante especializada también llamada Alpinum. Es la que se construye imitando los paisajes rocosos alpinos y se usan plantas con requerimientos extremos dado las condiciones ambientales de su origen.


Sección de la Rocalla Alpina dentro del Invernadero Davies de plantas alpinas de Kew Gardens. Foto de Guillermo Chaves.
La rocalla seca es la combinación jardinera de roca ígnea o metamórfica con plantas  xerofíticas, algunas de estas también son conocidas como crasas o cactáceas. En rocallas secas se utilizan rocas ígneas que actúan con respecto a las plantas como elementos caloríficos.


Sección de la Rocalla Seca dentro del Invernadero Princesa de Gales de Kew Gardens. Foto de Guillermo Chaves.

La rocalla tropical es una combinación jardinera de roca sedimentaria cubierta con vegetación de origen tropical. En rocalla tropical utilizaremos la roca sedimentaria, en la que ya los procesos químicos internos han concluido y es propensa a cubrirse de vegetación.


Sección de una Rocalla Tropical usando canto rodados y bromelias. Diseño y Foto de Guillermo Chaves.

La rocalla de cantos rodados. Que por el origen de la piedra puede sugerir que se combine el agua con plantas hidrófilas para generar formas dinámicas frente a las estáticas en la ambientación. Otros jardines de rocalla tienen un énfasis particular en la roca por sí misma, que si se trabaja con criterios de diseño y buen gusto suelen ser muy atractivos.
Una rocalla excepcional es una obra de carácter único e irrepetible. En este caso coleboré en el concepto y elaboración de un jardín con una gran colección de piedras labradas antiguas. Está ubicado en Hacienda La Laguna, Curridabat, Costa Rica. Todas son piedras que tenían una función utilitaria, como es el caso del pilón para moler café, el salero para darle sal a las vacas, lavaderos, etc.  




Rocalla excepcional con piedras labradas antiguamente. Diseño y Foto de Guillermo Chaves.


Para la jardinería de rocalla se utilizan terrenos con buen drenaje, da mayores posibilidades de construir niveles y taludes si la topografía es quebrada. Las piedras que se seleccionen deben ser escogidas personalmente según el efecto que se quiera lograr. Debe haber preponderancia de grandes piedras que se deben colocar primero y que son las piedras que terminan articulando todo el panorama. Con estas se conforman los desniveles, con las piedras de menor tamaño y gravas que conforman el resto del roquedal. Dependiendo del tamaño de los desniveles se debe proveer accesos en forma de gradas con la misma piedra, con un acabado rústico, para circulaciones internas o de mantenimiento.


Rocalla con piedras labradas y con cantos rodados. Aquí se pueden ver unas gradas dejadas para el mantenimiento dentro del jardín Wanamaker. Escazú, Costa Rica. Diseño y Foto de Guillermo Chaves.


En los países tropicales son de suma importancia los desagües y descargas de agua llovida, ya que las lluvias suelen ser copiosas. Lo mejor es usar la misma piedra, incluyendo las grandes para crear un pequeño lecho de riachuelo que semeje los naturales y que permitan la rápida evacuación pluvial.
Las descargas de agua llovida se pueden amortiguar y promover la infiltración al suelo con un arreglo de piedras,  gravas y plantas que dispersen el flujo y no llegue a los causes de los ríos con gran velocidad.
La orientación de la rocalla es algo que se debe pensar bien, lo ideal es que forme pequeñas terrazas en una pendiente no muy pronunciada, con una orientación sur o suroeste preferentemente. Recordemos que por la latitud de nuestro país, Costa Rica, se reciben más horas sol durante el año si se da esta orientación.
También podemos clasificar la rocalla por su ubicación en el jardín. En este caso tenemos el ejemplo de la:
Rocalla plana, que el terreno sea plano no impide que se pueda tener un jardín de rocalla, desde los inicios del siglo XX se han hecho muy populares los jardines con temas botánicos y otros énfasis muy diversos e imaginativos. Plantas de uso culinario o medicinal, también los jardines de colección como bromelias o cactáceas son opciones para estos suelos.
Rocalla en talud, muchas veces se recurre a obras civiles de ingeniería para solucionar el problema de la erosión de las pendientes, un recurso muy ingenioso es hacer un jardín de rocalla en los taludes y usar vegetación que ayude a amarrar y consolidar el suelo.


Rocalla con piedras encontradas en el sitio y con desniveles y montículos configurados usando máquina pesada, también se uso la maquinaria para colocar las piedras más grandes. Escazú, Costa Rica. Diseño y Foto de Guillermo Chaves.


Rocalla en terrazas, si la topografía lo permite, en los terrenos accidentados se pueden crear terrazas y ondulaciones. Aún un pequeño cambio de pendiente puede ser el configurador de un gran atractivo visual. Los pequeños causes de un riachuelo y las gradas rústicas pueden estructurar un paisaje mucho más dinámico.
Rocalla en farallón, son obras impresionantes debido a la verticalidad y el uso de la piedra expuesta. Es difícil crearlas sin obras complementarias de ingeniería, ya sea combinando una estructura subyacente de concreto con una aparente de piedras, o directamente, creando un muro con solo rocas que deben ser “solaqueadas” (rellenados los intersticios entre piedras con concreto). En estos casos es necesario asegurarse de que hayan ranuras y hoyos en que las plantas se puedan colocar.  


Rocalla con cantos rodados en el jardín Wanamaker. Costa Rica. Foto de Guillermo Chaves.
Las rocallas empezaron a ser un estilo de jardinería ornamental muy de moda en la época de Luis XV y durante la Regencia. Propio del Rococó son las líneas redondeadas evocando las volutas de las conchas y las hojas cuyos contornos son ondulados. En los países tropicales son otros los requerimientos y énfasis con que se pueden proponer los jardines de rocalla. Recuérdese que el epifitismo es una de las más especializadas manifestaciones de la biodiversidad, y precisamente son las plantas que en su hábitat se adhieren a soportes inertes como las rocas o los troncos de los árboles (aunque estos estén vivos no parasitan el árbol hospedero). Es un tipo de planta que se da más en los trópicos de América y algunas especies como las bromelias son estrictamente del Nuevo Mundo, pero hay gran diversidad en orquídeas, cactáceas, aráceas, helechos y otras que son de requerimientos parecidos. Son plantas de una gran belleza en sus flores y su follaje, son relativamente fáciles de mantener y reproducir.
Jardines de Rocalla de Kew Gardens
Esta es una descripción que se basa en datos tomados de la página oficial del Kew y una visita personal que puede realizar al sitio (1). Kew Gardens incursionó en la creación de pequeños jardines de rocas desde mediados del siglo XIX, pero no fue hasta 1882 que se construyó un jardín de rocas de importancia. La decisión se vio acelerada gracias a una donación de 3.000 plantas alpinas, de una de las colecciones más grandes en el país en ese momento. El Director William Thistleton-Dyer, quien fuera el director del Royal Botanical Gardens, Kew desde 1885, queriendo evitar la creación de algo "tosco y molesto", optó por diseñar un pequeño valle de 150 metros cuadrados, similar a un hábitat de las montañas de los Pirineos. En el  medio había un camino sinuoso, simulando un curso de agua natural. Fue hecha de bloques de (cheddar limestone) piedra caliza cheddar, Bath oolita (también un tipo de piedra caliza) y rocas rescatadas de las ruinas de los edificios antiguos en Kew.


Foto de Guillermo Chaves.
La reconstrucción y un nuevo diseño
Los bloques de piedra caliza oolita se sustituyó en parte en 1913 y a partir de 1929, la piedra caliza cheddar fue sustituida gradualmente con piedra arenisca de Sussex, que conserva más la humedad y permite que se cultiven una mayor variedad de especies. Esta reconstrucción se prolongó hasta 1968.
Con la construcción del Conservatorio Princesa de Gales en 1987 se reconstruyeron sus alrededores. Se creó una nueva construcción para las plantas del Himalaya. Luego se realizaría una nueva cascada y jardín del pantano que se construyó en el centro del jardín de rocas, este fue terminado en 1991.Se reordenaron las plantaciones para ser consecuentes con el tema geográfico, y las plantas de montaña se distribuyeron en seis grandes regiones representadas. La construcción del nuevo Invernadedo de planta alpinas Davies en 2005 llevó a trabajar un área más. No solo se crearon los jardines de rocalla alpina del nuevo invernadero sino que el jardín de rocas de los alrededores. En el extremo sur se construyó una nueva área para dar cabida a las plantas de Australia y Nueva Zelanda.


Foto de Guillermo Chaves.
La reconstrucción de una sección alrededor de Invernadero de plantas alpinas y la nueva área de plantas de Australia y Nueva Zelanda.
En el 2007 se estaban ampliando y reconstruyendo estas secciones lo que me permitió observar que el proceso. La piedra arenisca de Sussex es una piedra sedimentaria del período Cretácico Inferior. Es muy usada en Inglaterra para construir muros, hacer restauraciones de obras antiguas y también para pavimentos y muros. Es una piedra que también permite hacer obras de contención a manera de muros ya sea ciclópeos, es decir haciendo muros gruesos con piedra y concreto o como en este caso, usando piedras grandes de formas cúbicas que se plantan bien en el suelo sobre sus caras planas, lo que facilita el proceso, se pueden construir terrazas, desniveles, bordes de lagunas, etc.


Jardín de Rocalla Alpina en cosntrucción durante el 2007. Foto de Guillermo Chaves.
La zona de la cascada corresponde a un ambiente de humedal, que fueron necesarios para cultivar la colección de especies de América del Norte. Construido con 250 toneladas de piedra arenisca Sussex, una cascada domina la visual en esta sección, está junto con un estanque que se abastece con 100.000 litros de agua por hora. Los altos niveles de humedad en la zona de los humedales circundantes son mantenidos por un revestimiento de baja densidad reforzado de geomembrana de polietileno. El Duque de Kent inauguró y abrió la nueva sección del jardín de rocas de América, el 26 de abril de 1994. (2)


Foto de Guillermo Chaves.
Las reconstrucciones son un proceso entre hortícola y casi “arqueológico” ya que antes de comenzar a trabajar en la fijación de las rocas se debe mover cualquier planta que desee conservar y reproducir, así se cuenta con plantas para colocar de nuevo una vez que se ha terminado el trabajo de reposicionar la roca y cambiar el sustrato. Cada roca es colocada comprobando que se encuentren a nivel, Las rocas se ajustan muy cuidadosamente para empaten bien juntas. Generalmente los ajustes se hacen con cincel y a mano, para hacer que encajen perfectamente. Esto hace que sean muy estables y se espera que duren en su nueva posición por otros 60 años. (3)


Foto de Guillermo Chaves.
Este jardín de rocas es de los más completos del mundo y muestra una gran colección de plantas de montaña, plantas de zonas mediterráneas y especies amantes de la humedad de todo el mundo.
La sección de Europa incluye plantas nativas de Gran Bretaña además de otras plantas de las zonas montañosas de Europa. Algunos ejemplos son las saxífraga púrpura (Saxifraga oppositifolia) y la rara rosa Cheddar  (gratianopolitanus Dianthus). La sección de África y el Mediterráneo muestra las especies de la cuenca mediterránea, incluyendo el sur de Europa y Norte de África, así como las plantas de las montañas del sur de África que son lo suficientemente resistentes para crecer fuera de los invernaderos.


Foto de Guillermo Chaves.
La sección de Asia muestra las plantas alpinas del Himalaya, el Cáucaso, China y Japón. Estas van desde la ornamental hierba cebra (Miscanthus sinensis) al árbol bonetero alado (alatus Euonymus). La zona de Australia y Nueva Zelanda incluyen las plantas de los Alpes del Sur de Nueva Zelanda y el sureste de Australia. La sección de América del Sur muestra la colección de plantas de los Andes y la Patagonia y la sección de América del Norte muestra una gran cascada que cae en una zona pantanosa, con plantas amantes de la humedad. También muestra las plantas alpinas de las montañas Rocollosas y de los Apalaches. En este momento hay cerca de 2500 plantas que diferentes que crecen en esta parte del jardín.


Foto de Guillermo Chaves.
(3) http://www.kew.org/news/kew-blogs/renovating-the-rock-garden.htm


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4 comentarios:

  1. Hay algún jardín publico donde se pueda apreciar este tipo de diseños? Me encantan!!!

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  2. El Lánkester tiene un buen ejemplo de Rocalla paisajística. El jardín de la hacienda la Laguna en Tres Ríos, aunque no es público si se puede visitar con una cita previa.

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